1.1. EL DESARROLLO DE LA GUERRA


 1.1. EL DESARROLLO DE LA GUERRA

La guerra de Sucesión, que comenzó en 1702, fue al mismo tiempo una contienda civil, pues enfrentó a Castilla y a la Corona de Aragón, y un conflicto europeo, ya que en ella participaron varios países del continente. 

Los primeros años del conflicto fueron favorables al bando austríaco, pero en 1707 este sufrió una importante derrota en la batalla de Almansa, que permitió al bando borbónico recuperar el control del reino de Valencia y, poco después, el de Aragón. A partir de este momento, solo Cataluña siguió luchando en el bando del archiduque Carlos. 

En cambio, en el plano europeo, las fuerzas estuvieron muy equilibradas hasta 1711. Ese año la guerra dio un giro definitivo, cuando el archiduque Carlos fue nombrado emperador germánico tras la muerte de su hermano José I. Este nombramiento rompió la Alianza de La Haya, pues los demás países temían que, si Carlos ganaba la guerra, el Imperio germánico y España se unieran bajo un solo monarca, se reconstruyera el imperio de Carlos I y se desequilibrara el mapa europeo. Así, Gran Bretaña y Holanda dieron por finalizadas las hostilidades y firmaron la paz.

Aun así, la guerra continuó en Barcelona y en otras zonas de Cataluña hasta el 11 de septiembre de 1714, cuando las tropas de Felipe V conquistaron la ciudad de Barcelona, que había estado sitiada durante catorce meses. En 1715 conquistaron Mallorca. 

La resistencia catalana se explica por su negativa a aceptar la supresión de sus fueros e instituciones, tal y como les había ocurrido a Aragón y Valencia. Esta supresión fue recogida en los Decretos de Nueva Planta, que se habían aprobado para estos territorios en 1707, y que se iban a promulgar para Mallorca en 1715 y para Cataluña en 1716, una vez finalizada la guerra.








Comentarios